El ARN marcado en ratones jóvenes se detecta 2 años después en cerebros de ratones adultos.
El ARN ha recorrido un largo camino desde ser un simple “mensajero” o “traductor” de información genética canónica durante la producción de proteínas. Se ha descubierto una gran cantidad de nuevos tipos de ARN no codificantes, incluidos miles de ARN no codificantes largos (lncRNA), muchos de los cuales no tienen funciones identificadas. A lo largo de esta “revolución del ARN”, se ha pensado que una propiedad del ARN es constante: los ARN son moléculas de vida corta que rotan, a diferencia del ADN, que es mucho más estable. Zocher et al. desafiaron ese paradigma al mostrar que el ARN recién sintetizado marcado con 5-etiniluridina (EU) en ratones posnatales tempranos todavía estaba presente en muchas células cerebrales 2 años después. El complejo patrón de cuándo y qué células se marcan sugiere que la EU que se incorpora al ARN en las células progenitoras neurales (NPC) con frecuencia permanece en las neuronas adultas. Esto sugiere que una diversidad de ARN largos y ricos en repeticiones, denominados colectivamente ARN de larga duración (LL-RNA), pueden ser elementos estables en células neurales posmitóticas y quiescentes.
El ADN genómico que reside en los núcleos de las neuronas de los mamíferos puede ser tan antiguo como el propio organismo. La vida útil de los ARN nucleares, que son fundamentales para la arquitectura adecuada de la cromatina y la regulación de la transcripción, no se ha determinado en tejidos adultos. Zocher y colaboradores caracterizaron los ARN nucleares que no se renuevan durante al menos dos años en un subconjunto de células nacidas posnatalmente en el cerebro del ratón. Estos ARN de larga vida se retuvieron de manera estable en los núcleos de una manera específica para el tipo de célula neural y fueron necesarios para el mantenimiento de la heterocromatina. Por tanto, la duración de la vida de las células neurales puede depender tanto de la longevidad molecular del ADN para el almacenamiento de información genética como también de la extrema estabilidad del ARN para la organización funcional de la cromatina.
JEANNE LAWRENCE AND LISA HALL. Exceptionally long-lived nuclear RNAs. RNA labeled in young mice is detected 2 years later in adult mouse brains. SCIENCE, 4 Apr 2024, Vol 384, Issue 6691, pp. 31-32. DOI: 10.1126/science.ado5751.
S. Zocher et al., Science 384, 53 (2024).